martes, 24 de febrero de 2009

Entre el deseo de cambio y el miedo al cambio


La preocupante situación global de la economía está modificando todos los comportamientos. Se anhelan cambios que ilusionen y auspicien una reactivación, pero esto convive con la aplicación de medidas defensivas para evitar el colapso que son recetas del pasado y dificultan los cambios que toda crisis propicia y que entorpecen la aparición de innovaciones que podrían transformar en nuevas oportunidades lo que con miedo sólo nos parecen dificultades.

Esta crisis está poniendo de manifiesto graves errores de comunicación de los políticos y los medios de información que agudizan los sentimientos de inseguridad y esto dificulta que la población y los agentes económicos recuperen la confianza.

Las empresas necesitan vender pero la población prefiere ahorrar. ¿Cómo estimular una mayor demanda?

Las distintas técnicas de marketing y de comunicación comercial podrían y pueden contribuir a mejorar esta contracción del consumo. ¿Pero con los argumentos que han venido siendo los habituales? Parece que no. Disponemos de más y mejores medios y canales, de más variados formatos para establecer conexiones con los consumidores, algunos posibilitan una capacidad de diálogo capaz de retroalimentar a las empresas de modo que pueden saber de un modo directo lo que sus clientes esperan de ellas, un valioso estímulo para la innovación. ¿Pero están las empresas preparadas para absorber toda esta información y transformarla en mejoras sensibles que al aumentar la satisfacción de sus clientes aumenten el consumo?

1 comentario:

  1. Pocas empresas están preparadas para aprovechar todo esto en su favor y transformarlo en innovación y creo que son más las que sufrirán para simplemente intentar ir dando respuesta con lo que puedan. A considerar que las modificaciones no son siempre fáciles y suelen obligar a procesos de reingeniería y financiación "extras"
    MH

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